lunes, 23 de abril de 2018

PÁGINAS DE VIDA...


La luz tintinea en la ventana...
Se abre la memoria, que enciende
tu idea y tu sentimiento:
¡Empieza la vida!
Un constante revoloteo en el árbol
despierta las palomas de tu intuición,
que levantan el vuelo
trayéndote su voz y su presencia:
"Estoy aquí, contigo..."
El repiqueteo de su risa pinta las paredes
de color y un arco iris inunda
la estancia...
Suena el teléfono y su voz te recuerda
que no hay distancias, que seguís
unidos en sincronía por encima
del tiempo...

El tiempo se para cuando maúlla el gato
y el viento golpea los tejados,
mientras ruge  y amenaza el trueno.
Contienes el aliento y te escondes
en la quietud al sentir un quejido
lejano que parte el alma...
Llueve y estalla la tormenta,
el agua emprende su sinfonía
sabia y reflexiva, mientras tu humildad
hace sus piruetas tratando de bailar
al ritmo de la lluvia.
El silencio pone tu emoción en marcha
y recorres los rincones del misterio
en busca de respuestas y voces
que enmudecen...

Se oye una canción lejana, que abre
en sus brazos de cielo, palabras
de aliento...
Tu alma toca la magia inefable
de la infinitud y surge su armonía
en tus adentros...
En ese instante sientes que se unen
la luz, los sonidos y las voces
en un mismo sentimiento,
siempre presente:

LA VIDA TIENE LATIDO Y SENTIDO
GRACIAS A TI...!!


Imagen de Google.
Madrid 23-abril- 2018
M. Jesús Muñoz

sábado, 7 de abril de 2018

EL TIEMPO, MIRADA DE AMOR.


El tiempo nos golpea al nacer,
nos provoca el dolor y la lágrima.
Nos piropea y nos riñe,
nos abraza y nos araña.
Nos pinta la flor y el fruto,
la madurez y la experiencia.
Se escurre entre los dedos
y se disfraza de olvido y nostalgia.
Se sienta en nuestro regazo
y escribe en las lineas de la piel
nuestra historia de vida...

Nos pone frente al espejo de los días,
porque somos tiempo infinito,
que acaba y empieza.
Nos regala silencios de luz,
que nos enseñan a desentrañar
el fondo de la alegría y la tristeza.
Nos llama con voces lejanas,
que nos acercan al universo.
Nos impulsa a elevarnos sobre la materia
y ver unidos el pasado y el presente,
alumbrando el futuro.

El tiempo se viste de calma,
cuando miro el paso de las nubes.
De ilusión, cuando crecen
 los brotes de la parra.
De misterio, cuando siento
 los pasos del gato.
De intuición, cuando la paloma
salta de rama en rama.
De fé y esperanza, cuando alzo
 mis ojos al cielo.
De fortaleza y valentía,
cuando el alma sueña y calla.

El tiempo es LA MIRADA DEL AMOR INFINITO,
que nos mantiene y nos espera...


Imagen de la parra del pueblo en primavera.
Madrid 7-abril-2018
M.Jesús Muñoz