Allá, dormido en la cima
cimbrea el eco de un sueño;
blanco suspiro de un ángel
que nos regaló "la dicha"
para ser reto
en el tiempo.
Entre el viento, la piedra y la palabra,
juntos, tú y yo,
en pos del equilibrio.
Delirio por llegar,
tocar la cumbre;
abrazar el éxtasis en la entraña
y el vértigo profundo
del abismo.
Juegan, libres, mis sombras con tus soles
y se pierde mi sol
entre tus sombras
cuando la tarde borra
sus esquinas y juega
al desconcierto de los nombres,
cautivos en la estación
de las horas.
Laberinto de rosas y de espinas.
Tren sin viaje al universo infinito,
donde tejemos
un mantel de estrellas;
mil retazos de ilusiones
perdidas,
citándose en el campo
del olvido.
Tu y yo en danza, despliegue de cometas
al viento, uniendo destino y vida;
pasión de cielo y vocación de alturas,
buscando un sueño
de dicha
y leyenda:
suspiro de un ángel
dormido
en la cima.
Imagen: Pirineo Aragonés.
Madrid 28-marzo-2021
M.Jesús Muñoz