miércoles, 16 de octubre de 2024

MI ÁRBOL Y YO...


 Podaron tus ramas,
cortaron tu copa,
te dejaron desnudo
aterido 
y sin hojas...

dolía verte, sentir tu silencio
de largos días y horas...

Fuiste un Cristo
en la ladera,
dentro de un andamio,
encerrado,
en primavera

Hice mío tu dolor, tu silencio
y tu espera.

Un buen día de verano,
desarmaron hierros
y planchas del andamio...
se abrió tu encierro
y feliz respiraste
liberado...

Respiré contigo,
mientras la savia, jubilosa,
corría en tu tronco
y despertaban en mi huerto
revuelos de mariposas...

Supe que esas blancas alas
a los dos nos traían nuevas cosas...

El sol acarició tu resistencia,
abrazó tu temple
y besó tu infinita grandeza,
que apuntaba hacia arriba
con inocencia 
y nobleza.

El milagro estaba ahí,
despertando la consciencia...

Ramitas y hojas se dieron cita 
en tu hermoso tronco,
que escuchó extasiado
el canto vespertino
de un viejo pájaro...

...Y la luz nos deslumbró a los dos
más allá de los tejados...

Mi alma abrazó tu maestría,
tu humilde y preciado ejemplo,
que, en silencio, me enseñó
tu entrega y paciencia
latiendo sin tiempo.

Cada día respiramos, sentimos
y agradecemos juntos
que, después del dolor,
la vida nos regala
la luz...La luz reflejo del AMOR...


Imagen de Google.
Corral de Almaguer 16-octubre-24
M.Jesús Muñoz.


4 comentarios:

Mª Jesús Muñoz dijo...

Queridos amigos, este poema os cuenta una historia verídica. Hay un árbol en casa, pegado a la pared del vecino y a veces sus ramas rozan su tejado...Decidieron cortar su copa y sus ramas, cosa que fue una auténtica experiencia para él y para mi...Espero que os guste.
Os dejo mi abrazo entrañable y agradecido.
Sed felices, amigos.

inma dijo...

Querida M. Jesús, vivido, sentido, emotivo y bellísimo renacer. Gracias. Besos

chema dijo...

un bello poema, con final feliz. los andamios -o más bien quien ordena su instalación- me suelen despertar sentimientos muy poco amistosos. me quedo con la parte en la que el árbol se regenera y crece de nuevo, aún con más fuerza.
abrazos, mªjesús!!

Rafael dijo...

Es un bonito recuerdo el que llega con tus versos de ese árbol...
Un abrazo.